Los vecinos de los municipios de Viñuelas (123 habitantes), Casa de Uceda (93 habitantes), Villaseca de Uceda (36 habitantes), Valdepeñas de la Sierra (168 habitantes), Valdesotos (25 habitantes) y Tortuero (18 habitantes), perdieron hace tiempo el servicio diario de Correos. Es lo mismo que se malician otros en la propia capital de la provincia, donde el reparto no llega… simplemente porque no hay nada que entregar. Y cada vez menos.
En estos días, alcaldes como el de Viñuelas, Arsenio Pérez, han valorado la aprobación «unánime» por parte de la Diputación de Guadalajara de una moción para reivindicar ante el Gobierno central la recuperación de este servicio en los pueblos donde se ha perdido. Pérez espera que así sea, porque lo considera «vital para los pueblos».
Pérez señala, en declaraciones a Europa Press para LA CRÓNICA, que ahora apenas les llega el servicio de Correos dos días a la semana. «Nos ha quedado un servicio esporádico, el que te arriman, y vienen cuando quieren y dejan las cartas por ahí, en la gasolinera, a un vecino o a mí para que las entreguemos nosotros», señala este alcalde, que no responsabilizada de ello a los carteros –que «no conocen el pueblo y bastante hacen en entregarlas»– sino a la propia empresa pública, por actuar de esta forma.
Desde que se jubiló hace varios años el cartero de la zona, de código postal 19184, que era el encargado de repartir el correo en Viñuelas, Casa de Uceda, Villaseca de Uceda, Valdepeñas de la Sierra, Valdesotos y Tortuero, cuenta que les han ido adjudicando carteros, que iban cambiando de vez en cuando. Desde el mes de diciembre, «las cosas han ido a peor» y, según Pérez, aunque no les ha llegado ninguna notificación oficial, lo evidente es que ya no hay servicio diario. «Nos han quitado ese servicio», apostilla.
Disconforme, el regidor de este pequeño municipio de la Campiña ha remitido ya un escrito a la Delegación de la Junta en Guadalajara, a Correos y también a la Subdelegación del Gobierno, quejándose de una decisión que tanto él como otros municipios afectados consideran que se adopta sin tener en cuenta al medio rural que «tan en boca tienen muchos políticos», subraya Pérez, lamentando que a eso se añada el hecho de que no se les haya dicho nada al respecto.
En perjuicio de los más mayores
Hace meses, El Paseante de LA CRÓNICA daba detallada noticia de Jean-Marie Leduc, un anciano de Canadá que se negaba a recibir notificaciones oficiales que no le llegaran por vía postal. Más cerca, en Viñuelas, Pérez no niega que los tiempos evolucionan y que hay otros medios para recibir comunicaciones y correos, pero considera que hay muchos mayores en el medio rural que reciben todo tipo de notificaciones por Correos y ahora no saben ni cuando les van a llegar las cartas ni cuando llegarán las que ellos escriben. «La Administración tiene que mantener los servicios en el medio rural, aunque no sean rentables», insiste el alcalde de Viñuelas ante la progresiva desaparición de servicios en su pueblo.
«No es lógico que nos quiten un servicio de golpe y porrazo, de forma unilateral y tan fundamental como es Correos», enfatiza, recordando que no es normal que se tengan que acercar, a veces, hasta la gasolinera, para recoger el correo porque el cartero que va «de forma esporádica, a menudo las deja allí».
Pero lo que aún crispa más a este alcalde es el hecho de que no se les tenga en cuenta para nada y que no se les comuniquen decisiones de este tipo que tanto afectan a vecinos mayores de localidades como la suya, con una población de unos 170 habitantes, en la que hace tan solo unos meses echaba también el cierre la única entidad bancaria que tenían.
«No se demandan grandes servicios pero qué menos que no nos retiren los que tenemos. No se puede abandonar a la gente porque todos pagan sus impuestos», ha puntualizado.
