Los profesionales del Hospital de Guadalajara están ya en plena fase de formación para el uso del quirófano híbrido del que va a disponer el complejo hospitalario.
A diferencia de los quirófanos ordinarios, los «híbridos» incluyen en la misma estancia los dispositivos necesarios para hacer sobre la marcha pruebas de imagen y diagnóstico al paciente al que se está interviniendo.
En consecuencia, los cirujanos disponen de imágenes de alta calidad para hacer tanto cirugías abiertas como procedimientos mínimamente invasivos, pudiendo realizar tomografías, escáneres o resonancias magnéticas en la misma mesa de operaciones y sin tener que trasladar al paciente.
Una larga espera de años
La novedad se ha hecho de rogar, puesto que se lleva hablando de ella desde antes de 2020.
La idea inicial era que parte del importe de la adquisición de estos equipos se abonara con fondos comunitarios Feder, dentro del programa operativo REACT para el periodo 2014-2020.
La licitación se hizo al año siguiente, para dos quirófanos híbridos en Toledo y el de Guadalajara por un importe de 4,8 millones de euros. Llegan ahora.