El pasado martes, 3 de marzo, los lectores de LA CRÓNICA se abalanzaban sobre una noticia con un titular muy expresivo: ¿Por qué aumenta tanto el paro en Guadalajara? Los datos de los últimos meses son constantemente negativos. En febrero, además, mientras en España aumentaba el empleo, en esta provincia decrecía. ¿Cuáles son las causas de que el mercado laboral de Guadalajara vaya incluso a la contra de las tendencias del resto de España?
Para Pedro del Olmo, secretario provincial de UGT, «el paro aumenta, pero no últimamente. Si miramos atrás, vemos que en febrero de 2018 el incremento fue de 408 personas; en febrero del 2019, tuvimos otras 580 personas de incremento neto y en febrero de este año, ha habido 480. Se confirma que en Guadalajara febrero es un mes malo para el empleo. Lo es porque el sector logístico, que es el que tira del mercado laboral de Guadalajara, no es capaz de absorber la mano de obra existente».
«Se hacen 9.429 contratos y solo el 7 ciento son de carácter indefinido. Todo esto significa que durante periodos cortos del mes trabajan, pero antes de terminar el mes están nuevamente en el desempleo. Podríamos resumirlo en pocas palabras: temporalidad, precariedad y gran rotación de trabajadores» concluye Del Olmo.
José María Rey, de CCOO, abunda en una línea similar. «El comportamiento del sector servicios marca la tendencia del mercado laboral en nuestra provincia. Otros sectores tienen un peso muy relativo en la contratación, exceptuando la campaña agrícola de recogida del espárrago, que está estabilizada en el tiempo. En Guadalajara, el 15 por ciento del total de la afiliación al régimen general es en Transporte y Almacenamiento».
«Un dato muy relevante en la logística en nuestra provincia son las contrataciones por empresas de servicios auxiliares. Un tercio del total de los mozos de almacén son contratos de ese tipo, que son muchos pero con muy poca estabilidad en el empleo».
Rey incide también en un hecho significativo: lo diferente que es Guadalajara respecto al resto de Castilla-La Mancha en cuanto a su tejido económico. «Guadalajara tiene datos muy distintos al resto de Castilla-La Mancha. Una prueba es que la actividad económica que ha registrado más contratos entre las mujeres ha sido la Logística, con el 30 por ciento de las contrataciones… pero con un dato escalofriante: en Guadalajara, el 40 por ciento de los contratos a mujeres ha tenido una duración de hasta 7 días. Este es un dato que dato que no podemos separar del hecho de que sea en la Logística donde más contratos de mujeres se registran».
«Desde Comisiones Obreras instamos a impulsar el empleo de calidad para toda la población trabajadora. Terminar con la precariedad es un objetivo prioritario», enfatiza Rey.
Políticos discrepantes
Entre los políticos, se detectan discrepancias en la interpretación, dependiendo de su lejanía o proximidad al poder más que de su ideología. Y silencios también.
Así, el presidente del grupo parlamentario de Ciudadanos en las Cortes regionales, el alcarreño Alejandro Ruiz, lamentaba los datos de empleo en la provincia destacando que “por tercer mes consecutivo encadena un aumento del paro”. En efecto, como recuerda Ruiz, “en el mes de diciembre se perdieron 592, en enero 1.149 y en febrero 480 empleos”. Además, apunta que “mientras en España estamos registrando mejores datos de paro desde 2015, la provincia sigue encadenando malos resultados”. “Guadalajara es la provincia española donde más evidente es el deterioro económico y donde las políticas del gobierno socialista de Sánchez están teniendo un peor impacto”.
Desde el PP, su diputado José Ignacio Echániz se ha acercado a Guadalajara esta semana para dar alguna valoración al respecto, como ya ha recogido LA CRÓNICA en otra información.
Izquierda Unida de Castilla-La Mancha se ha mostrado preocupada por los «inestables» datos de paro registrados en la región, y para su coordinador regional, Juan Ramón Crespo, estas cifras vienen motivadas por «seguir apostando por el mismo tipo de políticas inestables de empleo» y sin «verdaderos esfuerzos por parte del Gobierno para apostar por el empleo estable y de calidad». Así, Crespo ha lamentado que Castilla-La Mancha sea «el último lugar al que una persona quiera venir a trabajar, ya que las condiciones laborales que se están fomentando son pésimas», a lo que ha añadido que la región «en estos más de diez años tras la crisis no se ha recuperado y el tejido productivo sigue siendo el mismo».
Ni CEOE ni Junta de Comunidades han atendido la invitación de LA CRÓNICA para aportar su análisis sobre esta cuestión.