El COVID-19 sigue extendiéndose en buena parte de Guadalajara en esta segunda ola de la epidemia. Lo hace en 15 poblaciones de la provincia mayores de 500 habitantes, según los datos oficiales de la Junta que han sido publicados este viernes. Con todo, el dato más grave, cuantitativa y cualitativamente, es el de la capital, donde han aumentado un 17% los casos durante la última semana y tiene un acumulado de 538 casos desde el 28 de septiembre, lo que da un índice de 626,52 por cada 100.000 habitantes, muy superior al de otras localidades del entorno, incluso de la Comunidad de Madrid.
El caso de Azuqueca y Marchamalo
Azuqueca de Henares y Marchamalo, que coincidieron en el tiempo en la imposición de medidas especiales, tienen aparentemente algo más controlado el virus, con un ligero descenso en la primera y un ligero aumento en el número de casos en la segunda. De las dos, es Marchamalo la que está aún más cerca de los índices de la capital (575 casos por 100.000 habitantes) mientras que los azudenses se quedan en un más tranquilizador 428 por cada 100.000. Nada que ver con los 50 casos por 100.000 que desatan todas las alarmas cuando se dan en Alemania, cifra que coincide con el objetivo que esta misma semana se marcaba Fernando Simón.
Como se puede comprobar más abajo, en las tablas que adjuntamos, las localidades que han aumentado el número de casos de una semana con otra son Albalate de Zorita, Albares, Almonacid de Zorita, El Casar, Cifuentes, Guadalajara, Horche, Jadraque, Marchamalo, Sacedón, Tórtola de Henares, Trijueque, Trillo, Uceda y Valdeaveruelo.