El arzobispo de Toledo, Francisco Cerro Chaves, ha aprobado hace unos días la iniciativa de la Delegación diocesana de Familia y Vida para realizar el curso prematrimonial online, por la necesidad que han manifestado algunos novios que van a contraer matrimonio en el último cuatrimestre del año y que no han podido realizar los cursos en sus parroquias, porque se han suspendido debido a la pandemia.
El arzobispo de Toledo, que esta semana dirige su escrito a los novios y matrimonios, ha explicado que ante esa necesidad se ha lanzado esta iniciativa que solo pretende ser una ayuda para los novios y las parroquias. «Es mejor realizar el curso prematrimonial de manera presencial y así os lo recomiendo, pero para loscasos en los que no sea posible, se os ofrece esta alternativa».
Haciéndose eco de la palabras del Papa, ha afirmado que «el matrimonio no es una institución que pretende cubrir nuestras necesidades afectivas, sino una realidad muy grande que trae a la tierra, de manera real y palpable, el amor de Dios; es una vocación, no una opción entre otras muchas».
Esto exige, ha recalcado, «una preparación intensa, sincera, generosa y honesta». «Un matrimonio cristiano no puede alcanzar su plenitud si todo se deja a la inercia, sin prepararse humana y cristianamente, como desgraciadamente ocurre en muchos casos».
«La Iglesia, movida por un deseo sincero de que los cónyugesy la futura familia encuentren una felicidad auténtica y permanente, quiere ayudar a los novios a descubrir la grandeza del matrimonio», aunque «la realidad tristemente nos pone delante la crudeza del sufrimiento que muchas veces experimentan los jóvenes que han llegado a la boda sin apenas profundizar en el paso que van a dar».
«Las consecuencias que trae este error son muy dolorosas y dejan heridas difíciles de curar. Ahí quiere estar la Iglesia; ella quiere ofrecer el apoyo y la gracia que el Señor promete derramar en el corazón de aquellos que responden a esta vocación matrimonial».
Se ha dirigido a los jóvenes esposos para recordarles que no deben olvidar que «la boda fue un día del calendario, pero casarse hay que hacerlo todos los días». «Todos los días tendréis que renovar vuestra alianza sacramental y para ello contáis con las ayudas espirituales que la Iglesia os ofrece; así, vuestra familia –Iglesia doméstica– se edificará con la caridad conyugal de vuestro vínculo sacramental».
Para esta primera etapa del matrimonio les ha recomendado el Proyecto Family Rock que «tanta aceptación» está teniendo y que merece la pena que conozcan los futuros esposos.