CCOO ha lamentado que las muertes en el trabajo se disparan «de forma alarmante» en Castilla-La Mancha, que está «a punto de cerrar un año negro» en esta materia.
Según ha informado el sindicato en nota de prensa, con dos meses aún por computar, 48 personas trabajadoras han fallecido en accidente laboral en la región, 21 más que en el mismo periodo del año pasado, lo que supone un crecimiento del 77,7%, «y habrá que sumar nuevas muertes que han sido noticia en noviembre y diciembre».
La estadística de accidentes laborales que publica el Ministerio de Trabajo y Economía Social deja «datos muy preocupantes» en Castilla-La Mancha, donde de enero a octubre se han registrado un total de 23.184 accidentes de trabajo con baja, 21.461 en jornada y 1.723 in itinere.
Del total de accidentes laborales, 22.948 fueron calificados como leves, 188 graves y 48 mortales. De los 23.184 accidentes laborales, 21.500 los sufrieron personas trabajadoras asalariadas y 1.684 por cuenta propia. Con un índice de incidencia de 284,1, Castilla-La Mancha es la tercera comunidad autónoma con mayor siniestralidad laboral y Guadalajara con un 354,4 la provincia del país con peores datos.
El análisis por provincias deja 8.145 accidentes laborales en Toledo (14 mortales, frente a las 6 de 2023), 4.442 en Ciudad Real (13 mortales, frente a 3), 3.954 en Guadalajara (10 mortales, frente a 4), 3.896 en Albacete (9 mortales, frente a 6) y 2.747 en Cuenca (2 mortales, frente a 8). Si comparamos estos datos con los del mismo periodo de 2023, hay una bajada en el número total de accidentes laborales del -0,97%, 228 menos en números absolutos, si bien aumentan los accidentes graves y sobre todo, de forma alarmante, los mortales, pasando de 27 el año pasado en el periodo analizado a los 48 de este 2024, lo que supone un crecimiento del 77,7%, advierte Raquel Payo, secretaria de Diálogo Social, Institucional y Salud Laboral de CCOO en la región.
«Nadie debería perder su salud o su vida por el simple hecho de trabajar, pero la realidad es que cada día siguen produciéndose accidentes en las empresas y aumentando las muertes en el trabajo en nuestra región, lo que pone de manifiesto un claro déficit de cultura preventiva», advierte Payo.
La evolución de la siniestralidad laboral en estos diez primeros meses del año deja cifras «verdaderamente dramáticas» y desde CCOO insisten en que existe «un gravísimo problema» de siniestralidad laboral en la Comunidad Autónoma.
Para el sindicato esta es «una lacra que hay que combatir». «Los accidentes y las enfermedades laborales pueden evitarse con unas adecuadas medidas de prevención en los centros de trabajo y quienes tienen la responsabilidad legal de implantarlas son las empresas, así lo dicta la Ley de Prevención de Riesgos Laborales, que si se cumpliera permitiría evitar la mayoría de los accidentes laborales», manifiestan.
En este sentido, abundan en que «con una prevención eficaz la siniestralidad laboral es evitable».