Cuando los concejales del PP y Vox se refieren al «agujero» de Guadalajara no se refiere al que crece en Miguel Fluiters, como consecuencia de una pésima elección para el material del pavimento, según conocen bien los lectores de LA CRÓNICA. Los actuales ediles con responsabilidad de gobierno aluden a las deudas del Consistorio.
En efecto, Alfonso Esteban, concejal de Hacienda en el Ayuntamiento de Guadalajara, sostiene que el «agujero económico provocado por el señor Rojo», en alusión al anterior alcalde, no para de crecer incluso un año después del traspaso de las responsabilidades municipales, en junio de 2023.
Según Esteban, el quebranto está en los 23 millones de euros. Y lo ha detallado.
El concejal recuerda que en el último ejercicio del PSOE con Ciudadanos hubo «ingresos previstos, que después no se recaudaron, por valor de 9 millones de euros, entre el ICIO, las licencias urbanísticas y el canon de urbanización». Igualmente, señala que las facturas pendientes de pago no previstas «superan los 3 millones de euros», «a lo que hay que sumarle la ejecución de una sentencia que el señor Rojo conoció, pero no pagó, por valor de casi 1 millón de euros, en concreto, 949.727,43 euros», aclaraba el concejal. Estos datos han sido esgrimidos ya en más de una ocasión.
Más interés tiene la referencia a las revisiones de precios de Serveo y Guadalagua, por cerca de 6 millones de euros. Y más aún el coste de los nuevos servicios de transporte y parques y jardines, por casi 4 millones de euros, que ha negociado el actual equipo de gobierno.
«El señor Rojo se dejó todo por hacer y ha puesto en peligro los servicios públicos de la ciudad para pagarle la fiesta a la señora Simón y rascar algún voto en las elecciones», interpreta Esteban. «No solo no se hizo nada, sino que encima se gastaron los 18 millones de euros de ahorros» del Ayuntamiento.
La cuentas (pendientes) del alumbrado de Guadalajara
El concejal responsable de Alumbrado Público, José Luis Alguacil, es quien ha aportado cifras sobre la situación con la empresa encargada de ese servicio en la ciudad, Serveo. “El agujero del equipo de gobierno anterior con la empresa adjudicataria de alumbrado público roza los 2 millones de euros, 1.942.710 euros, que estamos pagando con mucho esfuerzo, por negarse a realizar las revisiones de precios correspondientes. Este equipo de gobierno ha pagado ya casi 200.000 euros a Serveo», aclara.
Igualmente, en su condición de responsable también del área de Parques y Jardines, ha hecho mención del nuevo contrato de zonas verdes. «El señor Rojo dejó un contrato de Parques y Jardines completamente exhausto, sin maquinaria, con escasez de personal. Prefirió destinar parte de esos recursos al área de Festejos, que se llevó buena parte del incremento del coste que suponía este contrato” ha aseverado el responsable de Parques y Jardines, quien ha tachado de “irresponsable” al anterior regidor de la ciudad, y ha anunciado un aumento de la contrata de parques y jardines en un 62,5%.
A su vez, el tercer teniente de alcalde, Santiago López Pomeda, es quien repasa la situación con la empresa Guadalagua y el nuevo servicio de transporte urbano de la ciudad de Guadalajara. «Durante el mandato anterior, el PSOE de Alberto Rojo no abordó las revisiones de precios, lo que ha provocado un agujero de 4 millones de euros, que es lo que el Ayuntamiento le debe a la empresa responsable de la gestión del agua en Guadalajara, que ante la inacción del gobierno de Rojo inició 2 procedimientos judiciales contra el Ayuntamiento». «Este equipo de gobierno estamos trabajando para pagar este agujero que dejó Rojo a la ciudad. Ya hemos pagado casi 650.000 euros y estamos estudiando cómo pagar los 3,4 millones restantes» expone López Pomeda.
«A los 4 millones ya indicados hay que sumarle el riesgo en la prestación del servicio, la generación de problemas financieros en la concesionaria y la paralización de inversiones, como la construcción de la depuradora de Iriépal. Esa que el Gobierno de Rojo anunció, pero no pagó, como con todo», insiste el concejal. «A todo eso hay que sumarle el impuestazo de Page por el consumo del agua, el mal llamado canon del agua. Un sablazo a los bolsillos de los guadalajareños, que tenemos que recaudar los ayuntamientos para que se lo gaste García-Page».
En cuanto a la deuda del Ayuntamiento con la empresa concesionaria de transporte interurbano, que “roza los 850.000 euros” aclara el tercer teniente de alcalde “que, a consecuencia de la prórroga forzosa, aumenta en 600.000 euros cada año”, y está engrosada por “gastos de hasta 2021”.