Los dueños de dos bares de la zona del Hospital General de Ciudad Real han sido condenados a dos años de prisión, inhabilitación para el ejercicio de la hostelería durante un año y tres meses y a indemnizar a los vecinos que habitan las viviendas situadas en el edificio por causarles diversos trastornos psiquiátricos debido al incumplimiento de la Ordenanza del Ruido producido por los aparatos emisores que situaban en las terrazas y la masificación de clientes.
Así se desprende de la sentencia facilitada por el Bufete Díaz de Mera, en la que los jueces han considerado como hechos probados que desde mediados de 2012 y hasta 2016 se han producido ruidos emitidos en dos locales de hostelería ubicados en los bajos de un edificio ubicado la Avenida Reyes Católicos de Ciudad Real, donde residían los cinco vecinos demandantes.
Tales emisiones, superaron los límites máximos establecidos en horario nocturno, entre las 23.00 y hasta las 7.00 horas, según la Ordenanza Municipal de Ruidos y Vibraciones de Ciudad Real que se pudieron demostrar por las actas de inspección acústica realizada por la Policía Local a requerimiento de una de las vecinas.
Varios expedientes
Además la sentencia explica que desde el Ayuntamiento se tramitaron varios expedientes sancionadores por tal motivo además de detallar los diferentes trastornos que esto causo a los vecinos demandantes.
En la sentencia se argumenta que los acusados eran conscientes donde estaban ubicadas las terrazas, el ruido que emitía la gente o la televisión cuando estaba encendida y que a nadie se le escapa que esto perturbaba el sueño y el descanso de los vecinos.
Delito contra los recursos naturales y el medio ambiente
También se esgrime que los propietarios eran conocedores de que los vecinos se quejaban, «por lo que sabían que disfrutaban de una policía benevolente y de un Ayuntamiento que les protegía, o al menos, no agotaban las posibilidades que sus competencias le otorgaban para evitar tales molestias».
Por esto han condenado a ambos por un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente en concurso ideal con cinco delitos leves de lesiones, con la atenuante de dilaciones indebidas, a dos años de prisión, 12 meses de multa con cuotas diarias de 10 euros, un año y tres meses de inhabilitación especial para el ejercicio de profesión u oficio relacionado con la hostelería. Además deberán indemnizar a cuatro de los demandantes en la cantidad de 13.500 euros y en 4.000 euros a un quinto.