Hace casi un año, más exactamente a comienzos de abril de 2022, los técnicos municipales ya tenían redactada y comunicada la memoria para cambiarle la cara a la Ronda de San Antonio y a las calles Manuel Medrano, Alvar Fáñez de Minaya y Francisco Quevedo. Como las obras del consistorio suelen ir despacio, en todos los sentidos, no sorprende que haya sido ahora, en vísperas de las elecciones municipales, cuando se anuncie su inicio.
Según ha podido confirmar LA CRÓNICA, dentro del propio equipo de gobierno se ha llegado a ver con cierta pesadumbre el empeño de abordar en estos momentos un proyecto que no se terminará hasta noviembre, si se cumplieran las previsiones, y que añade más molestias a los que se mueven por el casco antiguo de la capital alcarreña. La duración estimada de este proyecto es de ocho meses y el comienzo ha sido este mismo lunes, como se comprueba en las siguientes imágenes:
La obra, valorada en más un millón de euros, ya estaba contemplada en los presupuestos de 2022, aunque se materialice ahora. El presupuesto se ha encarecido con el paso del tiempo, ya que si hace un año estaba cifrado en 1.022.82 euros, ahora se ha llegado a casi 1,2 millones, según la cifra desvelada este 10 de marzo.
Como consuelo, desde la Plaza Mayor destacan que 744.000 euros (sin impuestos) «serán financiados por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Plurirregional de España 2014-2020, que tiene como fin principal el desarrollo urbano sostenible gracias a la regeneración de los espacios urbanos degradados en el casco histórico de la ciudad».
De este modo, las máquinas resonarán a escasos metros del Ayuntamiento ya no sólo por Miguel Fluiters sino también en esta zona, a medio camino entre el Mercado de Abastos (cuya reforma de hace cuatro años sigue sin uso adecuado) y del Palacio del Infantado (con obreros tanto para rehacer la escalera de acceso como afanándose en eliminar la aluminosis del forjado de la galería del jardín sin tener que reconstruirla). Más allá, las obras del parking «disuasorio» junto a la Estación de Autobuses, enfrente de las del campus.
El político responsable de esta nueva barahúnda que se avecina es Rafael Pérez Borda, primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Guadalajara y concejal responsable de Urbanismo e Infraestructuras. Sostiene que se llevará a cabo «atendiendo a una reclamación de los vecinos del Casco Histórico».
Para empezar, cambios en el tráfico desde el lunes; atento al calendario
Este mismo lunes, 13 de marzo, se cortará al tráfico rodado una parte de la calle Manuel Medrano, en concreto la que va desde la calle Francisco Quevedo hasta la Ronda de San Antonio. Para que los vecinos puedan acceder a los garajes de la calle Francisco Quevedo, ésta cambiará su sentido.
La duración estimada de este corte de circulación y cambio de sentido es de tres semanas, correspondiendo a la primera parte de la primera fase de las obras.
Las obras se dividirán en tres fases. Se cambiarán las redes de saneamiento y el alumbrado público. También se llevará a cabo el soterramiento de las conducciones telefónicas y eléctricas. Se cambiarán también las acera y, obviamente, se pavimentarán de nuevo las calles.
En la primera fase se trabajará en la calle Manuel Medrano y está previsto que aquí finalice en el mes de abril.
La segunda fase del proyecto será el arreglo integral de la calle Alvar Fáñez de Minaya, que se dividirá en dos partes y cuyos trabajos se ejecutarán entre los meses de mayo y junio.
A continuación, se intervendrá en la calle Francisco Quevedo a finales del mes de junio.
Por último, se abordará la reforma de la Ronda San Antonio a lo largo de los tres meses de verano, julio, agosto y septiembre.
«Más cómodo para pasear», dice el concejal, así como más «sostenible»
El proyecto, además de la reparación de la calzada, también persigue mejorar la accesibilidad de la calle, adecuando las aceras y los pasos de peatones, así como su señalización horizontal y vertical», ha comentado Pérez Borda este viernes.
La sostenibilidad seguirá siendo una de las premisas a la hora de ejecutar esta obra, ya que «con esta renovación del firme, conseguiremos reducir las emisiones y la contaminación acústica que producen los vehículos que circulan por la zona, además de mejorar los itinerarios por el peatón, haciendo más cómodo pasear por aquí», ha llegado a valorar Pérez Borda.
Pérez Borda ha comentado que «estamos hablando de una zona de viviendas donde el perfil del habitante es mayor, por lo tanto, debemos destinar nuestros esfuerzos a conseguir que esta zona de tránsito y de conexión entre las Casas del Rey, las viviendas situadas en Cardenal González de Mendoza y el centro sea lo más accesible posible».