Telefónica, en colaboración con la Universidad Carlos III, Divisek y Dronitec, ha realizado en Matachines (Madrid) una prueba piloto con drones, basada en soluciones de Internet de las Cosas (IoT) para la detección temprana y prevención de incendios forestales.
El proyecto aprovecha las torres de telecomunicaciones que Telefónica tiene en España, donde se colocan sensores térmicos capaces de detectar cualquier posible foco de incendio en un perímetro de hasta 15 kilómetros.
Dentro de estas torres se sitúa un hangar con un dron, equipado también con sensores, una cámara térmica y una cámara óptica, al que los sensores térmicos, una vez detectado un conato de incendio, envían una alarma con la ubicación exacta donde puede haber comenzado un incendio.
El dron se desplaza entonces de forma autónoma hasta ese punto, incluso en condiciones de poca visibilidad, circunda el posible incendio para recoger imágenes ópticas y térmicas del fuego y envía en tiempo real toda la información que recoge gracias a la conectividad móvil.
Este sistema también permite que desde el centro de control de emergencias se pueda tomar el mando del dron en cualquier momento, para recopilar más información y rastrear el entorno de incendio. Una vez terminada la misión, el dron vuelve al hangar y se posiciona en él, recargándose de forma automática para estar disponible en caso de que sea necesario otro vuelo.
La prueba se ha realizado en colaboración con la Universidad Carlos III, Divisek y Dronitec. La Universidad ha desarrollado todo el sistema de vuelo autónomo y la interfaz con la que el servicio de emergencia ve toda la información en tiempo real, mientras que Divisek se ha encargado del sistema autónomo de recarga del dron y Dronitec ha colaborado en toda la parte de servicios asociados al dron.