Esto que sigue se ha podido leer este sábado en Twitter, escrito por una usuaria de Guadalajara, junto con la correspondiente foto:
Hoy de pincho, con una cocacola, me han puesto un huevo frito por un importe total de 3€. He pedido un tenedor y la respuesta ha sido que si me lo ponían, me tenían que cobrar otros tres. Así que me lo he comido con la mano, por 1ª vez en la vida. ¿Tan rara era la petición?
La fuente del comentario es fiable, sabe del negocio y de lo que habla.
Todos estamos deseando que esto mejore, que la pesadilla termine y que pasarlo bien se convierta en una rutina más en nuestras vidas, como lo era hasta que el virus se metió por medio.
Desde hace semanas, se está comprobando que para algunos establecimientos la «nueva normalidad» consiste en sajar al cliente, que bastante hace con acercarse al establecimiento, bajarse la mascarilla y confiar en no llevarse puesto nada que no llevase desde casa.
Todo esto, el mismo día en que otro guadalajareño moría de coronavirus.
Un poquito de por favor, por decirlo de alguno modo…