El lector de LA CRÓNICA recordará los ya lejanos tiempos en que un alcalde de Azuqueca de Henares rivalizó con Emiliano García-Page por el control del socialismo en Castilla-La Mancha, en liza por la secretaría general del partido.
No hablamos, obviamente, del alcalde azudense que ahora es presidente de las Cortes regionales, Pablo Bellido. Tampoco del actual regidor de la segunda localidad de la provincia, Miguel Óscar Aparicio, que aún tiene que darse más a conocer entre sus propios vecinos.
El protagonista de aquella batalla de 2017, que no dio pie a muchas sorpresas sobre el resultado final, fue José Luis Blanco, que en la actualidad es directivo de Renfe, la empresa en la que tantos años trabajó como revisor y en la cual, hace apenas dos años, hasta se fotografió con Pedro Sánchez en el AVE, el uno como factor y el otro como factótum.
Ahora, los tiempos han cambiado y las disputas entre García-Page y el sanchismo están tan en otro nivel que se da por cierto que desde Ferraz y Moncloa esta vez no se le va a poner otro candidat rival al toledano. Es difícil saber si en eso hay más de deseo que de certeza o de simple especulación.
Quizá con ánimo más escenificador que conciliador, el PSOE de Castilla-La Mancha ha abierto la puerta a que el presidente del Gobierno y actual secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, pueda asistir al congreso autonómico que los socialistas en la región celebrarán el 18 y el 19 de enero del año próximo. «La ejecutiva federal que salga del 41 Congreso de Sevilla será bienvenida». Lo avanza así el secretario de Organización del PSOE-CLM, Sergio Gutiérrez, en declaraciones a Europa Press para LA CRÓNICA.
Tras valorar que Ferraz haya refrendado a Emiliano García-Page para ser reelegido como secretario general de los socialistas castellanomanchegos, Gutiérrez ha señalado que no tiene «ningún sentido ni orgánico, ni político, ni electoral, plantear una alternativa» al actual líder del PSOE, mostrándose convencido de que no se materializará ninguna candidatura alternativa.
Tampoco ha considerado que vayan a surgir nombres alternativos a los actuales secretarios provinciales. «Nosotros tenemos la confianza plena en que puedan presentarse en la elección y, además, lo consideramos muy conveniente. No veo a ningún secretario provincial cuestionado en estos momentos», ha remarcado. Entre ellos está el de Guadalajara, el ya citado Pablo Bellido, que puede optar a la reelección. O no.