El Expreso Mesopotamia, que parte de Ankara, la capital de Turquía, y termina en Diyarbakır, en el corazón del sureste turco, ofrece una experiencia de viaje muy especial a lo largo de sus 1.051 kilómetros, por varias ciudades de Anatolia y sus paisajes.
Los pasajeros pueden disfrutar de estas localidades gracias a las distintas paradas que realiza el tren a lo largo de su trayecto.
El viaje de Ankara a Diyarbakır dura un total de 24 horas, con ciudades como Kayseri, Sivas, Malatya, Elazığ y Bingöl. La ruta incluye visitas de tres horas en Kayseri y Malatya, y una excursión de cuatro horas en Elazığ, dando a los pasajeros tiempo para descansar y explorar la arquitectura y los sabores locales de cada una de las ciudades. Además, el tren tiene capacidad para 180 pasajeros y ofrece servicios de restauración.
Una ruta única por los caminos culturales de Anatolia
Kayseri, ubicada en las faldas del Monte Erciyes y conocida por ser uno de los puntos de descanso de la ruta, ha convivido con varias civilizaciones desde los hititas. Además del castillo y las fortificaciones medievales en el centro de la ciudad, los viajeros pueden visitar múltiples monumentos selyúcidas, incluyendo el Döner Kümbet, la Gran Mezquita y la Madrasa Gevher Nesibe, que alberga el Museo de la Civilización Selyúcida. Además, la renombrada gastronomía de la ciudad, especialmente el «mantı», brinda una experiencia local inigualable.
Malatya, otra parada del Expreso, es hoy un cruce de caminos de comercio e intercambio cultural entre Mesopotamia y Anatolia, tal y como lo fue en el pasado. El Túmulo de Arslantepe, registrado en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, demuestra el legado histórico de la ciudad. Durante esta parada, los pasajeros pueden ver los edificios históricos más icónicos, como la Antigua Mezquita Ulu de Malatya, las murallas de la ciudad, así como comprar artículos de cobre hechos a mano en el Bazar de los Cobreteros y degustar albaricoques locales en el Mercado de Şire.
Elazığ, la siguiente parada de la ruta, ha sido un centro de fe, cultura y salud durante siglos debido a su ubicación en las rutas comerciales. Los castillos, bazares y mezquitas que adornan esta antigua ciudad, son testigos silenciosos de los pasados tiempos gloriosos de esta tierra. Las atracciones imprescindibles de la ciudad incluyen el Castillo de Harput, la Iglesia de la Virgen María y la histórica Gran Mezquita de Harput.
El Expreso Mesopotamia trasporta a los visitantes también a Diyarbakır, el corazón de la cultura mesopotámica. Esta ciudad, hogar de 33 civilizaciones en el pasado, espera a los viajeros con su diversidad.
Después de desayunar en el histórico Han de Hasan Pasha, los viajeros pueden visitar las Murallas de Diyarbakır y la Zona Cultural del Paisaje de los Jardines de Hevsel, recogida en la Lista de Patrimonio Cultural Mundial de la UNESCO. Otras atracciones de la ciudad son la Gran Mezquita, la Mezquita del Profeta Süleyman, el Museo de Arqueología de İçkale, el Castillo de Zerzevan y el Templo de Mitra.