El presidente del Grupo Parlamentario Ciudadanos en las Cortes de Castilla-La Mancha, Alejandro Ruiz, en nombre de su bancada, ha pedido la convocatoria de la Comisión del Reglamento y el Estatuto del Diputado para analizar el comportamiento de la diputada del PP Ana Guarinos, que en la sesión parlamentaria de la pasada semana utilizó desde la tribuna de oradores unos pantallazos de una conversación privada entre el propio Ruiz y su compañera de partido y portavoz del Grupo Popular, Lola Merino.
La intención es que se valore dentro de este órgano parlamentario si esta actuación es algo reprochable y si puede ser motivo incluso de sanción.
Revelación sin autorización
Según el escrito presentado por Ciudadanos, en el pleno del 10 de septiembre Ana Guarinos, desde el estrado, «procedió a leer partes del contenido de unos mensajes de Whatsapp» privados de Alejandro Ruiz dirigidos a Lola Merino.
Esta lectura «se produjo además de manera interesada, sin ser objeto del debate ni aportar nada a la causa que ocupaba el mismo, y sobre todo sin autorización expresa para ello».
«No sólo eso, sino que en el mismo momento que comenzó a intervenir en esta línea, intervine en viva voz para anunciar mi negativa a que se leyera cualquier tipo de mensaje privado de la conversación entre la señora Merino y yo, sin que Guarinos se inmutara», añade Ruiz.
Para Ruiz, «obvia decir que estos textos se incardinan, no solamente en el ámbito de una conversación privada, entre dos personas, de las cuales ninguna es la ponente, sino que además lo hacen en el seno de una negociación política».
Por ello, entiende que Guarinos «vulnera con ello no solamente preceptos constitucionales y penales, sino que además entronca de lleno contra los principios de privacidad de las negociaciones políticas».
«Si se permite este tipo de acciones, ¿qué será lo siguiente? ¿Hasta qué punto podemos tener la seguridad de que las negociaciones privadas seguirán siendo privadas? ¿Da con esta acción permiso el Partido Popular de Castilla-La Mancha a hacer públicas todas las conversaciones mantenidas con ellos en el seno de cualquier negociación?», se pregunta Ruiz, sugiriendo que «sería muy interesante que la ciudadanía pudiera conocer de las exigencias de este partido a la hora de ocupar alcaldías o diputaciones».
Creen que hay un ilícito penal
Para Alejandro Ruiz –abogado de formación–, los hechos cometidos en sede parlamentaria por Guarinos –«con la complicidad o no de la señora Merino»– se subsumen «en el tipo de penal previsto en el artículo 197 de nuestro código punitivo».
«Creemos que la señora Guarinos ha sido autora de un ilícito penal en la sede de las Cortes de Castilla-La Mancha, con los diputados presentes como testigos de su acción, y con la expresa negativa del diputado afectado a que continuara leyendo sus mensajes privados», recalca el texto.
Actitud dolosa
Esta actuación fue por tanto «con actitud dolosa y premeditación para intentar apoyar un reproche político» donde Guarinos «utilizó partes de una conversación privada, sin consentimiento y con expresa advertencia de no hacerlo, algo que por supuesto, obvió, continuando con su plan establecido».
Todo ello parecen «conductas reprochables a nivel no solamente penal, sino también político, amén del reproche a la ética que debe primar en las relaciones entre los diputados de esta Cámara».
Además, lamenta Ruiz que «no se haya producido en ningún momento disculpas, ni públicas ni privadas, ni de las actuantes ni de su Grupo Parlamentario».
El PSOE puede secundar la iniciativa
El Grupo Parlamentario Socialista, por boca de su presidente, Fernando Mora, ha asegurado que apoyará «a cualquier diputado que se pueda sentir desamparado ante la agresión de cualquier compañero». Así ha reaccionado Mora al ser preguntado si el PSOE va a apoyar al presidente del Grupo Parlamentario Ciudadanos, Alejandro Ruiz, en su petición de convocar la Comisión del Reglamento y el Estatuto del Diputado para analizar el comportamiento de la diputada del PP Ana Guarinos, que en el pleno de la pasada semana utilizó desde la tribuna de oradores unos pantallazos de una conversación privada entre el propio Ruiz y su compañera de partido y portavoz del Grupo Popular, Lola Merino.
«El PSOE va a apoyar sea quien sea el ofendido que estas cosas se traten en los órganos de la Cámara que así se consideren», ha abundado el diputado socialista, quien ha lamentado que «desgraciadamente» en las Cortes últimamente se estén dando determinados espectáculos que «no son propios del sentir común».
Mora, que ha afirmado que él asistió «al espectáculo» del anterior pleno «donde se hicieron determinadas revelaciones que no se ajustaban a las circunstancias que se estaban debatiendo», ha recalcado que «el compañerismo entre parlamentarios está por encima de la falta de decoro». Ha recordado que él mismo se sintió de alguna manera agredido en un determinado momento cuando se sacó una fotografía suya estando mareado y se vendió como que estaba durmiendo durante un pleno. «Nadie me pidió disculpas ni perdón. Pedí amparo a la Mesa de las Cortes y la Mesa me lo dio», ha remachado. «La corrección política y el decoro entre compañeros en la Cámara no puede ser que se traslade a la ofensa personal; una cosa es tener diferentes opiniones y otra cosa es que algunas cuestiones que no tienen que trascender fuera de la Cámara se realicen», ha dicho.
Ruiz ya avisó
Fue el pasado jueves cuando Alejandro Ruiz avanzó desde su escaño del Convento de San Gil que valoraría iniciar acciones legales contra la diputada Ana Guarinos por leer en el pleno un mensaje de WhatsApp relativo a la Proposición No de Ley de la formación naranja que promueve una ley sobre ocupación ilegal y que se vota este jueves en la Cámara autonómica.
Guarinos, en su turno de intervención, leyó una frase en un contexto privado emitido por parte de Ruiz a Merino en el que exponía que solo estaría a favor de promover una iniciativa parlamentaria sobre este asunto si partía de los tres grupos, porque el PP se quería colgar la «medallita» en esta propuesta.
Desde su bancada, Ruiz pidió la palabra para decirle a Guarinos que había incumplido la ley y el Código Penal en el derecho al honor, a la intimidad y al secreto de la comunicaciones.
«No vamos a permitir que las conversaciones secretas las manifieste en público. Valoraré las acciones legales oportunas, te lo he pedido expresamente. Olé Ana, muy bien», aseguró Ruiz.
Guarinos, desde su bancada, afirmó por su parte que había parado de leer en el momento que Ruiz se lo pidió, pero le retó a desmentir si el mensaje que había reproducido era mentira, cosa que Ruiz, desde entonces ha mantenido como cierto.
«Nos reiremos todos»
En declaraciones a Europa Press para LA CRÓNICA tras registrar formalmente esta petición, Ruiz rememora cómo se desveló este mensaje privado, y a la crítica suma que «no puede ser que el PP se atribuya algo que ya habían hecho PSOE y Cs» –en referencia a la proposición sobre la ocupación de viviendas–.
«El PP no presenta nada, pero el señor Paco Núñez da un canutazo y se arrogan la iniciativa parlamentaria. Como mucho, estaba dispuesto a que fuera una iniciativa de los tres partidos, pero ellos no querían una iniciativa, querían una foto. Hay que elegir entre la foto o la iniciativa y ellos eligieron la foto», ha aclarado.
Insiste en que Guarinos «vulnera el secreto de las comunicaciones», algo «delictivo» y que «vulnera el más absoluto ejercicio de ética política».