Han pasado tres años desde que sucedieron los hechos y ahora ya habido juicio y sentencia. La vecina de Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real) que mató a un gato en 2018, centrifugándolo en una lavadora, no va a entrar en prisión después de ser condenada a seis meses de cárcel. Dicha entrada en prisión ha sido suspendida.
Las investigaciones se iniciaron cuando se recibió una denuncia procedente de una protectora animal, por la supuesta comisión de un delito de maltrato animal a un gato. La barbaridad cometida se conoció gracias al visionado de unos videos colgados en Internet, que fueron adjuntados a la denuncia y en los que se veía como la mujer introducía al gato en la lavadora, iniciando un ciclo de lavado que supuso la muerte del animal.
A la denuncia inicial se sumaron otras seis denuncias más, tanto de Asociaciones Protectoras de Defensa Animal como de particulares de varias provincias del territorio nacional.
La mujer había subido a la red algunos videos e imágenes, además de mantener conversaciones con personas allegadas.
Críticas animalistas
La Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) ha pedido a la Justicia un «drástico endurecimiento» de las penas por maltratar y matar animales, después de criticar que
En una nota de prensa, ANPBA explica que las razones del juez para la suspensión de la condena son las «características del hecho», a pesar de que en la propia sentencia se recoge el «claro desprecio hacia la integridad del animal».
Si bien apuntan que las sentencias «han de ser aceptadas y respetadas», ANPBA pone el acento crítico en la redacción del Código Penal, preguntándose si las circunstancias del acto «no son suficientemente graves».
«¿No es horrendo que alguien someta a un animal a un sufrimiento tan intenso y despiadado, dando vueltas y vueltas en el tambor de una lavadora, hasta matarlo?», manifiestan.
Para la asociación, es un hecho «incuestionable» que la sociedad española está cada día más sensibilizada contra el sufrimiento animal y que manifiesta una opinión crítica ante «sentencias incomprensibles».
Por ello, la Asociación Nacional para la Protección y el Bienestar de los Animales (ANPBA) insistirá ante el Ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, y ante el Congreso de los Diputados, para la modificación de un Código Penal «tan laxo como absurdo, que contempla una pena máxima de dieciocho meses de prisión por maltratar a un animal hasta la muerte».
«Las penas actuales deben elevarse sustantivamente, como exige la sociedad actual, si es que queremos que el Código penal ejerza una verdadera función disuasoria», finalizan.