El secretario provincial de CCOO en Toledo, José Luis Arroyo, ha instado este miércoles a la Delegación Provincial de la Consejería de Economía, Empresas y Empleo a revisar el «ERTE-Covid» del que se está beneficiando la empresa Eulen de «forma ilegítima», cercenando el derecho de los representantes de sus trabajadores a la negociación colectiva y «aprovechándose fraudulentamente» de las exenciones en las cotizaciones a la Seguridad Social aprobadas por el Gobierno de España.
Según informa CCOO en nota de prensa, los 17 trabajadores que el Grupo Eulen tiene subcontratados en la factoría toledana de ICSA llevan desde abril sometidos a un ERTE por fuerza mayor.
«Entendemos que es fraudulento, porque no existe motivación de causa mayor y de hecho los trabajadores no han dejado de trabajar en ningún momento y realizan su jornada habitual exactamente igual que sus compañeros de la empresa principal», ha indicado Arroyo.
El secretario provincial de CCOO ha hecho estas declaraciones durante la concentración que han protagonizado los trabajadores afectados ante las puertas de la sede del Grupo Eulen en Toledo. Todos ellos han secundado este miércoles la quinta de las diez jornadas de huelga iniciadas el pasado mes de julio y que se prolongarán hasta entrado octubre, para exigir la negociación de las condiciones de la regulación de empleo a las que están sometidos.
Como todos los días, han comenzado la jornada concentrándose a las 7.00 horas a las puertas de su centro de trabajo, la planta de ICSA en el Polígono Industrial de Toledo. A las 10.00 horas se han trasladado hasta la sede de Eulen, donde han expresado sus protestas tras una pancarta con el lema «Eulen engaña y defrauda. ICSA no paga y respalda. Trabajadores de Eulen-ICSA en huelga», y donde han coreado sus reivindicaciones: «Eulen, ladrones, pagad las cotizaciones.»
La delegada sindical de estos trabajadores, Esther Page, ha explicado que su empresa, Eulen, logró desde el primer momento aplicarles un «ERTE-Covid» por fuerza mayor, y ha seguido manteniéndolo en las sucesivas prorrogas. «Sin embargo, la empresa principal, ICSA, negoció y acordó con su plantilla un ERTE por causas Económicas, Técnicas, Organizativas y de Producción.
«Todos estamos en ERTE de reducción de jornada, pero con diferencias muy significativas. Las dos plantillas tenemos el mismo horario, trabajamos las mismas jornadas y realizamos la misma actividad. Pero mientras ICSA aplica un ERTE ETOP negociado y acordado con sus trabajadores y paga a la Seguridad Social sus cotizaciones, Eulen se está aprovechando ilegítimamente de un ERTE por fuerza mayor, no negociado y con exenciones de las cotizaciones», ha argumentado.
En este sentido, ha explicado que los «ERTE Covid» están previsto para proteger a los trabajadores en situación de desempleo a consecuencia de la pandemia, y no para que multinacionales como Eulen aprovechen la «dramática situación» provocada por el COVID-19 para ganar aún más dinero «engañando y defraudando» a la Seguridad Social. «La autoridad laboral debe poner freno a esto», ha dicho.
