Los inusual se produjo este viernes en el cielo, sobre Sacedón y Pareja y durante casi una hora. Ese fue el tiempo, exactamente 50 minutos, que un Boeing 737 de Air Europa estuvo sobrevolando Entrepeñas, una y otra vez, para quemar combustible.
Los pilotos habían avisado a los controladores de Barajas, al poco de despegar, de que la aeronave presentaba un problema técnico.
Según han dejado constancia en sus redes sociales los responsables de la torre del aeropuerto madrileño, se trató de una avería que afectaba a los flaps.
“Se les instruye a esperar al este del aeropuerto y, una vez que la tripulación nos indica que están listos para regresar, les posicionamos para aproximación directa y aterrizaje en pista 32L abandonando por final de pista sin incidencias”, concluyeron.
Los pasajeros de ese vuelo, que tenía como destino Frankfurt, se hartaron de ver la cabecera del Tajo desde distintos ángulos y de forma persistente.
Con muchas horas de retraso emprenderían de nuevo vuelo desde Madrid y, esta vez sí, sin más contratiempos.
