El portavoz del Grupo Popular, Jaime Carnicero, ha lamentado la «incapacidad» del alcalde de Guadalajara, Alberto Rojo, para gestionar los contratos que tiene el Ayuntamiento con las empresas concesionarias de servicios, en concreto, con el Centro Acuático, con la empresa del transporte urbano de viajeros y con la empresa Guadalagua, que suponen una deuda de más de 4 millones de euros.
En lo que se refiere al contrato del transporte urbano de viajeros, Carnicero ha explicado que entró en vigor el 1 de abril de 2013 con una duración determinada de 10 años. «Finaliza este próximo 1 de abril; y es verdad que contemplaba una prórroga, pero cumpliendo unos requisitos que, a nuestro juicio, no se han cumplido», ha apuntado.
Según ha informado el partido, el portavoz del PP ha asegurado que Rojo no ha cumplido que en el barrio de Manantiales incorporase una nueva línea; que el barrio del Balconcillo incorpore otra línea o que Iriépal cuente con mayores frecuencias.
Dicho esto, ha recordado que «el pasado 31 de agosto del año 2022, en este caso Alsa, denunciaba y decía que no quería continuar con el contrato que finalizaba el 1 de abril de este año e instaba al Ayuntamiento a que agilizara todos los trámites para proceder a la licitación y posterior adjudicación; y desde ese día hasta la última Junta de Gobierno que fue este martes, Rojo no solo no ha contestado sino que ahora obliga a la empresa unilateralmente a continuar con este contrato».
Esta obligación va a originar una indemnización a las arcas municipales de «aproximadamente 700.000 euros», ha dicho Carnicero.
CENTRO ACUÁTICO
Por otro lado, respecto al contrato con la empresa que gestiona el Centro Acuático, el portavoz del Grupo Popular ha asegurado que el equipo de gobierno «aún tiene pendiente el reequilibrio derivado de la crisis de la pandemia del Covid, que asciende a unos 200.000 euros».
Por último, el portavoz del Grupo Popular ha dicho que con el contrato con Guadalagua, «el pliego obliga a que tiene que haber una actualización conforme al incremento del IPC, de la energía y al consumo del agua de la ciudad. «Preguntamos en pleno por esto y nos contestaron mintiendo para no dar contestación».
«Desde el año 2019 no se ha actualizado conforme a lo que marca la ley y ya podemos decir que se ha originado una deuda de más de 3,5 millones de euros en cuatro años y sin haber realizado ni una sola inversión destacable correspondiente al canon del agua; esta deuda la tendrá que gestionar la próxima Corporación y, desgraciadamente, la tendremos que pagar los vecinos de Guadalajara», ha explicado.