La Junta sostiene que ha solucionado los problemas de escasez de agua que padecían los vecinos de El Recuenco. Para hacerlo se han acometido, a través de la Agencia del Agua, dos obras que se han llevado a cabo en el último año y que han supuesto una inversión cercana a los 70.000 euros.
El delegado de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Santos López, ha visitado el municipio para comprobar cómo se han ejecutado los trabajos, junto a la alcaldesa, Pilar Blanco, otros representantes municipales y técnicos de la Delegación provincial.
Santos López ha manifestado su satisfacción ante el hecho de que “las obras permiten disponer de un agua de excelente calidad, con un caudal muy superior a las necesidades que tiene el municipio incluso en la época de mayor número de habitantes, como es el verano”.
Los trabajos se han llevado a cabo en dos fases. En la primera parte de la ejecución, entre octubre de 2018 y febrero de 2019, se llevaron a cabo tareas para la ejecución de un nuevo sondeo de abastecimiento de agua, con un importe de 48.000 euros.
El sondeo se realizó en las inmediaciones de las captaciones de agua existentes en la zona oeste de la población. Dichas captaciones se abastecían de un acuífero muy superficial, de unos siete metros de profundidad, que proporcionaba un caudal insuficiente. El sondeo permite ahora llegar a obtener un caudal de 17 litros por segundo de un agua que resulta apta para el consumo humano.
La segunda actuación, realizada de agosto a diciembre del presente ejercicio, ha consistido en el equipamiento y electrificación del sondeo realizado, junto con la conexión hidráulica hasta el depósito regulador. La obra ha tenido un coste de 21.686 euros. El sondeo se ha equipado con bomba centrífuga sumergible capaz de proporcionar un caudal de 3,2 litros por segundo y se ha conectado, a través de una nueva tubería con una longitud de 48 metros, hasta la tubería que llega al depósito municipal.
Estas dos obras han permitido resolver un grave problema de escasez de agua en el municipio de El Recuenco que se repetía cada año, principalmente en época estival. El descenso de nivel de las captaciones tradicionales provocaba serias restricciones en verano, lo que obligaba a realizar un suministro frecuente mediante camiones cisterna, situación que queda resuelta con estas actuaciones.
