Hay que remontarse al momento de iluminación de Rodríguez Zapatero cuando dijo aquello de que «bajar los impuestos es de izquierdas». Han pasado 22 años y eso mismo es lo que reclama otro partido incluso formalmente más progresista que el PSOE, en Guadalajara y sobre el IBI.
Ha sido el 4 de febrero de 2025 cuando AIKE, que cuenta con la única representación de Susana Martínez en el Ayuntamiento, ha explicado que centra sus enmiendas a los presupuestos del Ayuntamiento de Guadalajara para 2025 en la reducción del IBI, intentando reajustar un presupuesto «irreal» y minimizar «el sablazo» al bolsillo de los vecinos de Guadalajara. Siendo justos con el Grupo Socialista, la edil de AIKE se suma así a los últimos meses de lamentos continuados del PSOE en la misma dirección.
Plantean en sus enmiendas parciales desde AIKE una reducción de ingresos por IBI de 4 millones de euros, ajustando de 99,6 a 95,5 millones de euros los gastos del Ayuntamiento de Guadalajara para el ejercicio 2025, poniendo el foco «en lo ficticio de un presupuesto que infla los ingresos para cuadrar los números en el papel».
Para AIKE, las cuentas diseñadas por el Partido Popular y Vox son «irreales», están infladas con previsiones de ingresos que «no existen y no se ajustan a la realidad» y conducen al «desequilibrio» presupuestario, como avisan –según asegura– los informes de la intervención municipal desde hace tiempo.
Susana Martínez y Jorge Riendas, que han actuado este martes al alimón como portavoces de la formación, señalan que el actual equipo de Gobierno ahonda en los «mismos errores» que criticaba cuando estaba en la oposición, sin afrontar la realidad económica del Ayuntamiento y anunciando números «inverosímiles».
Susana Martínez ha resaltado que «ya son tres los ejercicios con errores continuados en la estimación de recaudación, solamente hay que mirar las liquidaciones presupuestarias de los años anteriores para ver que no es ciencia ficción». «En tan solo cuatro años hay un incremento del 35%, casi 30 millones de euros más, en el año 2021 el presupuesto municipal era de 71,5 millones de euros y ahora estamos en casi 100 millones», un planteamiento que implícitamente hace llegar los reproches también al anterior gobierno municipal, del PSOE con Ciudadanos.
Desde el grupo municipal esta «ilusión numérica» que solo existe «en el papel» viene «por distorsiones» en la recaudación de impuestos como la Plusvalía o el ICIO, estimados en 3 y 6,7 millones de euros respectivamente cuando los ingresos durante los últimos ejercicios «nunca han alcanzado esas cantidades».
«Estos ingresos sobredimensionados no son inocuos, pues siguen incrementando la capacidad de gasto de forma irreal, creando una gran desajuste entre ingresos y gastos».