El pasado lunes 23 de enero volvía abrir sus puertas uno de los locales más emblemáticos de Guadalajara. Bajo el nombre de «La nueva Flor y Nata», estamos ante una panadería y cafetería en el mismo local que, durante más de 100 años atendió como «La Flor y Nata», regentada en aquella larga etapa por la familia Hernando.
Este nuevo proyecto empresarial llega de la mano de Francisco Zaragoza, economista de formación y con dilatada experiencia en banca de inversión. En su haber tiene muchos años ya apostando y gestionando este tipo de negocios, tanto en Guadalajara como en otros puntos de España.
«La Nueva Flor y Nata» se presenta como un local moderno y renovado donde «el cliente podrá encontrar además de los panes tradicionales, todo tipo de panes saludables y de masa madre así como toda una línea de productos para celiacos, además de variedad de opciones para poder comer y merendar», destacan desde la empresa. Tampoco faltarán los bizcochos borrachos.
A la izquierda de la fachada se encuentra el mostrador para el pan, seguido del de pastelería. A lo largo de la parte que linda con la calle Montemar es donde se encuentran ubicadas las mesas de cafetería.
