Junta de Comunidades, Diputación de Guadalajara y la Asociación Católica de Ayuda, Acogida e Integración para migrantes y refugiados (ACCEM) han suscrito este marttes un protocolo de colaboración en Jadraque (Guadalajara) que permitirá la puesta en marcha del programa ´Como en casa: atención socionutricional a mayores en el medio rural´, un proyecto que todos han coincidido en su doble objetivo de atención a los mayores y de creación y sostenimiento de la economía y el empleo en los pueblos y que llegará de momento a 450 mayores de un centenar de municipios.
Un acuerdo tripartito que ha sido suscrito por el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; en nombre del Gobierno regional; el presidente de la Diputación, José Luis Vega; la directora regional de Accem, Julia Fernández, con el alcalde de Jadraque, Héctor Fernández, como anfitrión, teniendo en cuenta que es una de las cabeceras de comarca en las que se acometerá este proyecto.
Un programa que inicialmente arranca en 101 municipios de la provincia para 450 mayores pero que el propósito es que se vaya ajustando progresivamente a las necesidades que se generen en la provincia.
El presidente regional, en su intervención, y ante un aforo mínimo por las razones obvias de la COVID-19, ha resaltado la «extraordinaria envergadura» de esta iniciativa de la Diputación de Guadalajara, a la que se ha sumado el Gobierno de Castilla-La Mancha, entre otras razones porque participan organizaciones de trabajo «contrastado» y con capacidad de respuesta.
García-Page ha querido resaltar precisamente el trabajo que se hace desde el Gobierno regional y se debe seguir haciendo por uno de los colectivos más afectados por esta pandemia como son los mayores, teniendo también en cuenta que la esperanza de vida va en aumento.
Para el presidente, este proyecto tiene «una envergadura extraordinaria» que solo puede ser concebida por gente que está obligada a vivir en la cercanía, con referencia específica al trabajo que se realiza desde los ayuntamientos y, en este caso, desde la Diputación alcarreña.
De su lado, en su intervención, la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, se ha referido a este protocolo de colaboración como un proyecto «tremendamente humano» que, además influirá en la generación de movimiento económico encaminado al cuidado de los mayores y en la creación de puestos de trabajo.
En este sentido, la titular de Bienestar Social ha hecho referencia a la denominada ´economía plateada» y a las cifras en la Unión Europa al respecto, asegurando la importancia que tiene en el PIB el cuidado de las necesidades de las personas mayores.
Así, ha querido poner el acento también en que este pequeño va en consonancia con iniciativas muy innovadoras que se dan no solo a nivel del territorio español sino fuera de estas fronteras y siempre pensando en el bienestar de la ciudadanía.
Para la consejera, se trata de una acción muy innovadora que nació «pensando en las personas y que hoy es una realidad», que no solo atiende a colectivos «frágiles» sino que crea economía y que llegará a otros municipios de la región.
De su lado, desde la Diputación de Guadalajara, su presidente, José Luis Vega, ha recordado como nació este proyecto y los beneficios que tienen para la provincia más despoblada, y no ha querido dejar pasar por alto el hecho de que ha sido precisamente la COVID-19 lo que ha conllevado el «impulso» de este programa para mayores, entendiendo que también son uno de los colectivos a los que ha afectado más de lleno.
Vega ha resaltado la ilusión que ha presidido la iniciativa y la importancia de contar con todas las administraciones en pro «del bienestar de los vecinos y el desarrollo de la zona».
De momento, según ha explicado, se inicia en 101 municipios y para 450 usuarios, pero ha precisado que este programa «es solo un embrión» que va a seguir creciendo y que pronto, en este caso, gracias a la colaboración de Cruz Roja, se desarrollarán también en la comarca de Molina de Aragón, para ir implantándose «poco a poco» en toda la provincia.
Un programa que no solo supone llevar la comida y ayudarles a que tengan una dieta saludable sino ir a verles y combatir su soledad porque todos han coincidido en que ese es el trabajo de las administraciones.
«Es una iniciativa económica, de promoción para que nuestros pueblos empiecen tener vida, un programa novedoso y humano», ha apostillado.También se ha sumado a ello la directora de Accem en Castilla-La Mancha, Julia Fernández, para quien, cuando todos «reman» en el mismo sentido se avanza mucho más.
En esta línea, ha puesto el acento en el doble ingrediente de esta iniciativa: el elemento rural y los mayores, convencida de que «el poder asegurar una alimentación nutritiva y variada va a fijar la permanencia de muchos mayores en sus pueblos y entre sus gentes, que es lo que desean».
De momento, el programa ha empezado en Jadraque, Mondéjar, Brihuega, Sacedón y Sigüenza pero también ha incidido en que, en función necesidades, se irá dando respuesta.
De su lado, el alcalde de Jadraque, Héctor Gregorio, anfitrión del acto, ha señalado que convenios como este demuestran que «si se quiere, se puede».
Por su parte, el presidente de las Cortes de Castilla-La Mancha, Pablo Bellido, se ha referido a este programa como un proyecto con entidad «que tiene alma, corazón e inteligencia», ya que está pensado para atender a los mayores que no tienen necesidad de estar en una residencia pero que quieren tener esta atención y a los que así se les permite combatir la soledad y da tranquilidad a sus familias.