El consejero aragonés de Agricultura, preguntado este viernes sobre si su Ejecutivo teme un posible trasvase del Ebro al Segura, ha recordado que el Estatuto de Autonomía de dicha comunidad mandata a los poderes públicos a que se oponga a cualquier trasvase que cercene el desarrollo sostenible de Aragón, algo que también ampara su Ley de Aguas y Ríos.
Dicho esto, ha recordado que su región, que es «España interior», también presenta graves carencias en materia hídrica y por ello es «inconcebible» apoyar un trasvase. «Se nos puede tachar de insolidarios, pero no lo somos, primero tenemos que resolver nuestras carencias y deficiencias graves. Muchos pueblos tienen graves problemas de abastecimiento», ha terminado alertando.
Las declaraciones se hacían ante los medios tras el acuerdo que han Aragón y Castilla-La Mancha, entre el citado Joaquín Olona y el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural de Castilla-La Mancha.
Martínez, después de que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, haya asegurado que en ningún caso el Gobierno central contempla suprimir el trasvase del Tajo-Segura, ha destacado «la sintonía y los pasos conjuntos dados para consolidar el caudal ecológico del río», pese a que, a su juicio, esos avances «vayan despacio».
«Entiendo sus palabras. La normativa hay que cumplirla y es clara», ha asegurado Martínez, que ha vuelto a defender que el Gobierno de Castilla-La Mancha «no tiene problema» en que el trasvase sea para uso de boca, pero criticará y recurrirá siempre que sea para regadío.
Castilla-La Mancha no quiere ceder agua para regadío
«Así lo venimos haciendo desde 2015 con una coherencia extrema. Somos la única región que cede agua para consumo a otra, pero para regadío no», ha defendido el consejero, que ha recordado que para ello se construyeron las desaladoras, que hay que poner en marcha.
«Queremos que haya agricultura en el Levante, es importante para el país», ha asegurado Martínez, que ha recalcado que los agricultores de esta zona han de recurrir a las desaladoras para poder llevar a cabo su actividad, pues el agua del Tajo-Segura ha de ser «solo para consumo humano cuando haya necesidad».
En este punto, el titular de Agua de Castilla-La Mancha ha destacado el paso por el actual Ejecutivo regional de reducir de 38 a 27 los hectómetros derivados por el canal de trasvase en nivel 2.
«Agradezco el compromiso del Gobierno en ese sentido», ha insistido el consejero que, por contra, ha criticado que el Gobierno del PP, con Miguel Arias Cañete al frente de Agricultura y Medio Ambiente, modificara un Real Decreto, desoyendo a los técnicos, para derivar 38 hecómetros.
«Esto va a en línea de consolidar el caudal ecológico en el río» ha añadido el consejero, que ha puesto en valor el compromiso tanto de Castilla-La Mancha como del Ministerio para la Transición Ecológica en esta dirección. «Se avanza despacio, me gustaría que fuese más rápido pero por primera vez en muchos años se avanza porque hay coordinación, coincidencia y ganas de resolver».