Por insólito que parezca, en la capital alcarreña podemos encontrarnos con una gran obra pública que no sólo cumpla sus plazos sino que los reajuste para ver terminadas las obras incluso antes de lo inicialmente previsto. Eso es lo que han asegurado a LA CRÓNICA fuentes oficiales del Ministerio de Justicia para el edificio de los nuevos Juzgados, que se está levantando junto al acuartelamiento de los GEO, al otro lado de la A-2.
Según han informado a este periódico, los plazos actualizados de la obra del futuro Palacio de Justicia de Guadalajara contemplan su terminación en noviembre de 2018. De este modo, se confirma que el calendario ha sido adelantado, desde el inicialmente previsto de 2019, mediante reajuste de anualidades.
"A partir de la finalización de las obras, se realizarán las pruebas de las instalaciones, de forma que la recepción podría estimarse dentro del mes de diciembre de 2018", han asegurado a este diario. Tanto o más importante es que, según las mismas fuentes, "estos plazos no tendrían por qué verse afectados por la eventual prórroga de los Presupuestos Generales del Estado, ya que existe crédito comprometido suficiente para la terminación de las obras".
Como se puede comprobar en nuestra galería gráfica, en los últimos meses se han acelerado y mucho los trabajos, con parte del inmueble ya despojado incluso de los andamios que hasta hace poco lo rodeaban completamente.
Tras la espera, se terminará antes de lo previsto
Cuando en octubre de 2015 el ministro de Justicia, Rafael Catalá, declaraba oficialmente iniciadas las obras de la futura sede de los Juzgados de Guadalajara, se daba como año de conclusión de las mismas el de 2019 y como tiempo exacto de ejecución 40 meses, que pueden quedarse en 37 si se demuestran afinadas las previsiones avanzadas a este medio por el propio Ministerio de Justicia.
Sea como fuere lo cierto es que, con la presencia también en el acto del alcalde de Guadalajara, Antonio Román; el presidente del Tribunal de Justicia de Castilla-La Mancha, Vicente Rouco, y de jueces y fiscales de la provincia, el ministro anunciaba aquel caluroso día de 2015 una inversión de casi 11 millones euros para varias plantas, tanto bajo rasante como a la vista.
Antes de que la Constructora San José se pusiera manos a la obra, algo que se demoró durante meses con una posterior y larga interrupción, se procedió a llenar en el acto oficial una urna con una serie de elementos simbólicos que acreditaran el comienzo de los trabajos, entre ellos periódicos del día, el texto de la Constitución y el documento que acreditaba el inicio de obra.
¿Cómo será por dentro el edificio?
Este edificio escalonado dispondrá de hasta cuatro plantas sobre rasante y una superficie construida y destinada a zonas de trabajo de más de 10.000 metros cuadrados; otros 1.150 para área de detenidos y policía y unos 250 más a juzgados de reserva. Tendrá accesos peatonales, para vehículos, aparcamiento y zonas verdes.
Tan lento fue el arranque de este proyecto que en febrero de 2016 la senadora del PSOE por Guadalajara, Riansares Serrano, denunciaba la paralización de las obras del nuevo edificio de los juzgados, que no habían avanzado desde la colocación de la primera piedra. Casi cinco meses después, la parcela seguía completamente vacía y ni siquiera había empezado la excavación de los cimientos. También recordó la parlamentaria los vaivenes que había sufrido el proyecto durante los cuatro años precedentes.
Desde entonces, las críticas que se llegaron a prodigar se han convertido en silencio de unos y expectación de otros.