Para el sindicato ANPE, los planes de agrupamiento de alumnos para el próximo curso en el barrio del Balconcillo, que implicará el cierre del colegio «Río Tajo», «supone el cierre de uno de los colegios con más arraigo de la ciudad de Guadalajara».
Consideran desde ANPE que esta medida «se contradice totalmente en sí misma». Aunque admiten que hay un descenso de natalidad y, con ello, de matriculación en esta zona de la ciudad, ANPE denuncia que éste sea soportado exclusivamente por la Enseñanza Pública mientras que «en la enseñanza concertada, estos mismos gestores, mantienen todas las unidades de la capital para el curso que viene».
Contra el actual apoyo a la concertada
«Racionalizar recursos sería abordar una nueva zonificación en la capital y aprovechar las infraestructuras y las plantillas de las que disponen ambos centros para potenciarlos frente a los elevados costes que suponen para las arcas públicas los numerosos conciertos educativos suscritos hace unos días por el Gobierno regional y que ya vemos de qué manera afectan a nuestra provincia».
Entienden, además, que «esta forma de racionalizar los recursos es la que recoge explícitamente la nueva ley educativa (LOMLOE), que entró en vigor el pasado 19 de enero, y por la que, el Gobierno regional, para evitar su cumplimiento en este aspecto, se apresuró a renovar los conciertos educativos antes de dicha fecha, con las consecuencias tan nefastas para la enseñanza pública como las que ahora estamos viendo».