La Policía Nacional detuvo en la noche del lunes en Guadalajara a un hombre. El 091 fue alertado por la pareja de este individuo, que avisó del estado de intensa alteración que sufría. Así lo confirmarían los propios agentes poco después, dado lo laborioso e incluso peligroso de la operación que fue necesaria para detenerle.
Sobre las diez menos cuarto de la noche del lunes se recibía en Comisaría la llamada en la que una mujer solicitaba la presencia policial en las inmediaciones del aparcamiento del Cementerio debido a que su pareja, un hombre de mediana edad, se encontraba muy agresivo.
Trató de huir
Las patrullas que acudieron al lugar hallaron a este sujeto dentro de su vehículo y éste, al observar la presencia policial, se dirigió hacia los agentes en actitud amenazante, portando un hacha, con la que acometía tanto a los agentes como a los vehículos.
Esta persona, que no deponía su actitud y hacía caso omiso a las indicaciones de los agentes, trató de huir en dirección al río, poniendo en peligro a los ciudadanos que encontraba a su paso, por lo que tuvo que ser reducido y detenido.
Una vez arrestado, el hombre fue asistido por los servicios sanitarios debido al estado de excitación y agresividad en que se encontraba, dando así por finalizado el incidente, y no teniendo que lamentar daños personales.
La Policía Nacional está elaborando el correspondiente atestado sobre los hechos ocurridos, del que dará cuenta a la autoridad judicial, según han confirmado a LA CRÓNICA desde la Comisaría de Guadalajara.