El Grupo Municipal del Partido Popular en el Ayuntamiento de Guadalajara ha hecho un repaso, severo, de la mitad del mandato de Alberto Rojo como alcalde de la ciudad.
A preguntas de los periodistas, Carnicero ha asegurado que no puede reseñar absolutamente nada que haya hecho bien el alcalde en esta legislatura. A su juicio, lo peor es que actúe no como alcalde sino como «un comercial, un delegado del PSOE y de Emiliano García-Page».
A esa conclusión llegaba al final de una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por la mayoría de los concejales del PP en este mandato.
Carnicero ha calificado con un «insuficiente» los dos años ya cumplidos por el equipo de Gobierno formado por PSOE y Ciudadanos, un suspenso que ha atribuido, en parte, a que el alcalde, Alberto Rojo, «ha gastado muy poco en zapatos» para salir a la calle y hablar con los vecinos. Además, se ha mostrado especialmente crítico con la forma en la que el regidor alcarreño ha gestionado la pandemia y ha precisado que «lo único positivo es que ya queda menos para que deje la Alcaldía».
«Rojo será recordado por ser un alcalde anuncio que no dice la verdad», ha insistido el portavoz del PP, haciendo referencia a cuestiones como las ayudas a la conciliación familiar o la Operación Asfalto y tras criticar de forma especial el hecho de que decidiera subir los impuestos, incrementado así la presión fiscal en dos años un 12,5%, según sus cálculos.
Rojo, en el ecuador de su mandato
Justo cuando se cumple el ecuador del mandato, para Carnicero es evidente que Guadalajara tiene un alcalde «que no arranca, opaco, inseguro y que no toma la iniciativa» sino que está más preocupado de su imagen que de salir a la calle, una «parálisis» que «ha contagiado al resto del equipo de Gobierno».
Cree que Rojo no ha sabido liderar proyectos ni en los momentos más complicados y que, además, no tiene transparencia en su gestión.
«Ciudadanos ya no existe»
En cuanto a la coalición de Gobierno con Ciudadanos, el portavoz ‘popular’ ha reconocido que «va bien», y lo atribuye a que los tres concejales de la formación naranja «ya no existen» sino que son unos ediles más del PSOE. «El pacto funciona perfectamente bien para el PSOE y perfectamente mal para la ciudad de Guadalajara», ha subrayado.
Según Carnicero, si bien cuando gobernaba el PP, Ciudadanos no quería los planes empleo de la Junta, ahora no solo los quiere sino que «se hacen la foto»; además, «antes había que rebajar el dinero de fiestas y ahora se sube y también se incrementan los impuestos».
El portavoz del PP ha asegurado que hoy por hoy no percibe ninguna diferencia entre algunos concejales de la formación naranja y otros del PSOE. «Casi parecen más del PSOE Israel Marco y Rafael Pérez Borda que Santiago Baeza y Sara Simón», ha planteado supuestamente con ironía.
El cambio de nombre de las calles
Carnicero ha lamentado que de las 300 iniciativas planteadas por el PP solo en el último año apenas se haya dado respuesta al 10%, preocupándose el alcalde solo de cuestiones como cambiar el nombre de las calles de la ciudad.
Además, el portavoz del PP ha insistido en que Rojo «se esconde» de la ciudad y que en las asociaciones ya empiezan a quejarse de que «no se puede hablar con él», algo que ha atribuido a que centra su trabajo en seguir siendo el delegado del PSOE en Guadalajara y en perdonar más de 24 millones de euros a la Junta por el Fuerte de San Francisco. «Tenemos un delegado que piensa más en Toledo y en Page que en los vecinos de Guadalajara», ha planteado.
Carnicero ha lamentado que propuestas del PP planteadas por su formación en estos dos años de mandato tales como la declaración de la actividad deportiva como esencial, que el dinero de las Ferias y Fiestas pasadas fuera a la adquisición de test masivos o la ampliación de la zona de ocio de la ribera del Henares, no hayan sido atendidas, incluyendo también la creación de una comisión informativa para la tramitación fondos de la Unión Europea.
En todo caso, el portavoz ‘popular’ ha asegurado que su formación «no va a decaer» sino que va a continuar exigiendo al alcalde que «cumpla sus compromisos con la ciudad de Guadalajara» y para ello seguirán planteando propuestas.
«Nos gustaría que el rumbo de la ciudad cambiase y que no tuviésemos este letargo y tristeza que tiene», ha apostillado, suspendiendo el Gobierno de PSOE y Ciudadanos en Guadalajara, e incluso otorgándole en algún caso hasta un «muy deficiente».