Más de 15.000 personas se calcula que abarrotaron en la noche del jueves al viernes el Recinto Ferial de Cabanillas del Campo para asistir al concierto de Fangoria, con Alaska como gran estrella.
Olvido Gara, «Alaska», lució poderío y tres vestidos sobre el escenario, con un espectáculo pródigo en recursos visuales y con un sonido irreprochable.
Hubo tiempo para un repaso amplio. Temas del reciente último disco, «Edificaciones Paganas», pero también los grandes éxitos de todas sus épocas. Y no faltaron esos auténticos himnos de los tiempos de «Dinarama» o «Los Pegamoides», como «Bailando», «A quién le importa» o «Mil campanas», canción con la que se cerró la actuación en un «bis» que se trufó también de versiones de temas ajenos como «Perlas ensangrentadas» o «Estoy llorando por ti».
105 minutos de Alaska en Cabanillas
Fueron 105 minutos de actuación. Olvido, primero de plata, luego de negro, finalmente de rojo, derrochó saber estar en el escenario, acompañada de cuatro bailarines que acompañaron todo el espectáculo con sus coreografías.
En la parte musical, dos guitarras, el teclado de Canut, y bases de efectos pregrabados para redondear el espectáculo.
… y para seguir la noche, la verbena de «La Misión»
Tras el concierto de Fangoria, la noche se prolongó con la verbena de «La Misión», bien conocidos en Cabanillas. El grupo brilló como siempre con su epatante puesta en escena, con un escenario descomunal y espectacular, coreografías, números acrobáticos y magníficas voces, ofreciendo auténticos «hits» durante toda la noche.