Desde hace meses, la izquierda más a la izquierda del PSOE, la que votaba en tiempos a la Izquierda Unida de Blanca Calvo o Jordi Badel, la que luego salió a las plazas el 15-M hasta terminar votando a Podemos, venía alertando del riesgo de acudir fraccionada a las elecciones municipales.
Que los temores se consumaran parecía tan evidente como inevitable en la capital alcarreña, sobre todo después de hacerse visible la ruptura de Ahora Guadalajara (ver enlaces adjuntos), la plataforma electoral a la que se habían sumado en 2015 Más de Un Ciudadano, Equo y, sobre todo, IU.
Después de la jornada del pasado domingo y a la vista del resultado, lo ocurrido no ha sido exactamente eso, aunque admite varias lecturas.
De haber concurrido juntos, Unidas Podemos y AIKE (la candidatura formulada con Jorge Riendas y Susana Martínez al frente) habrían sumado 5.569 sufragios, lo que les habría facilitado un tercer concejal, uno más de lo conseguido con sus 2.947 y 2.622 votos obtenidos por separado.
La paradoja más sustancial es que ese hipotético tercer edil lo habrían tomado no de "las derechas", sino directamente del PSOE, que se habría quedado con 9. De ese modo la suma seguiría siendo insuficiente para alcanzar una mayoría sin Ciudadanos, que es a lo que ahora se está.
El cálculo anterior no tiene en cuenta, porque es imposible saberlo, cuántos de los antiguos votantes de Ahora Guadalajara se han quedado en casa, cuántos han votado al PSOE ni cuántos nuevos simpatizantes se habrían incorporado de haberse mantenido el proyecto.
Sí se puede recordar, en cambio que Ahora Guadalajara obtuvo en 2015 nada menos que 6.913 votos, a muy pocos de los necesarios para obtener el quinto concejal. Lo habrían logrado, sin duda, si el "Ganemos" de José Bielsa no hubiera concurrido de manera inopinada y equívoca a esas elecciones, detrayendo 942 sufragios a la postre decisivos para facilitar la continuidad del PP con Ciudadanos, al frente del Ayuntamiento durante los pasados cuatro años.
Dando por buena la realidad de esa bolsa de votos de izquierda más allá del PSOE, lo verificable es que la candidatura que encabezaba Alberto Rojo este 26-M ha sumado 3.200 nuevos apoyos entre los vecinos de Guadalajara para los socialistas. Mientras, los 5.569 sumados por Unidas y AIKE quedan a mucha distancia de lo que sumaron en los anteriores comicios con Ahora Guadalajara y más lejos aún si les añadimos los votantes "despistados" de Ganemos. Aquellos 7.855 sufragios de izquierdas están a 2.286 votos de distancia de la realidad actual, con apenas un concejal para cada una de las formaciones presentes en el Consistorio y sin relevancia para aglutinar mayoría.
En el camino desde 2015 a 2019 han perdido un 30 por ciento de electores, sin que muchos de ellos hayan dado su voto, presumiblemente, al PSOE. Están por redescubrir.