Ha pasado más de un mes desde la última reunión entre el Ayuntamiento de Guadalajara y la Junta de Comunidades para desatascar el proyecto de Ciudad del Cine en el Fuerte de San Francisco.
Fue el 14 de marzo de 2024 cuando Ana Guarinos, como alcaldesa, y José Luis Escudero, como delegado, se vieron las caras en un despacho de la Plaza Mayor. A la vista de que en el Ayuntamiento no se ha recibido ningún documento con una alternativa concreta a lo inicialmente planteado «y que sea legal, ajustado a derecho», llegados a este día en vez de insistir ante la otra parte para reclamar lo que está pendiente se ha organizado una rueda de prensa.
Obviamente, lo de hablar ante los periodistas no ha servido para resolver el problema y ni siquiera para encontrar respuestas a las preguntas planteadas, nada con lo que aportar nueva luz a un contencioso de previsible oscuro final.
Ni alternativa ni reunión
«La alcaldesa está dispuesta a reunirse mañana mismo con el delegado de la Junta si a continuación hay una reunión técnica y jurídica». Eso, expuesto con intencionada contundencia, es lo que ha transmitido Alfonso Esteban a través de los periodistas para, es de suponer, el mensaje llegue a su destinatario y obtener así una respuesta desde la Plaza del Jardinillo.
Las posiciones no se han movido y lo único que avanza es el tiempo, que condiciona el cumplimiento de los plazos para no perder los 8 millones de euros que la Unión Europea estaba dispuesta a aportar.
«Se están teniendo contactos», ha llegado a reconocer Santiago López Pomeda a preguntas de LA CRÓNICA, pero no parece que estos, sean cuales sean, hayan dado ningún resultado concreto, a la vista de la escenografía planteada este jueves por una de las partes implicadas con la cita en la sala de prensa del Ayuntamiento.
«El Ayuntamiento de Guadalajara no renuncia a nada, ni a la Ciudad del Cine, ni a un gran espacio cultural para los vecinos ni a la rehabilitación de las naves del Fuerte», enfatizaba Esteban al comienzo de su comparecencia. «Que no empleen (desde la Junta) este asunto como un lugar de enfrenamiento», apostillaba.
Y el tiempo de la rueda de prensa pasaba y pasaba, tan insoportable como la espera de todos a que el juez de lo Contencioso comunique qué va a pasar con la petición de cumplimiento de sentencia hecha también hace más de un mes por el Ayuntamiento y de la que, según sus responsables, no se sabe nada. Sin noticias, dicen, a pesar de que son casi 30 los millones de euros en juego y que ese dinero es, a fin de cuentas, lo que está en el origen de todo este embrollo.
Así, desde hace 20 años. Más los que vengan.