El consejero de Agua, Agricultura, Ganadería, Pesca, Medio Ambiente y Emergencias de la Región de Murcia, Antonio Luengo, ha defendido este lunes la necesidad de que el Gobierno central establezca un precio «asequible» del agua que no suponga un «agravio comparativo» de esa comunidad respecto a otras.
Luengo ha reaccionado así sobre la posibilidad de que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) fije el precio del agua desalada en 40 céntimos para compensar el «recorte» al trasvase.
«El concepto de seguridad hídrica que abandera el Gobierno de España no puede serlo a cualquier precio. Hay que apostar por asegurar la disponibilidad de recursos en cantidad y calidad suficiente, y también a un precio asequible, que no lastren el desarrollo económico de esta Región, que no penalicen a nuestros agricultores y que no supongan un agravio comparativo con lo que se paga por el agua en el resto de las comunidades autónomas», ha dicho el consejero.
Luengo ha mantenido este lunes una reunión con representantes de la Comunidad de Regantes de Mazarrón, en la que ha sostenido que «ahora mismo hay un precio subvencionado, ya de por sí alto, pero solo para este año 2022. Y son 41 céntimos, más IVA y distribución, frente a los menos de 5 céntimos que puede costar el agua de media en el resto de España».
El consejero ha indicado que la Comunidad de Regantes de Mazarrón «solo tiene recursos no convencionales, es decir, aguas desaladas y regeneradas, lo que pone de manifiesto que esta Región lleva décadas incorporando esos recursos como complementarios a aquellos que son habituales en el resto del territorio nacional».
A esto, ha añadido que «ahora, con la sequía a escala nacional, se empieza a hablar de la importancia de promover el uso de esos recursos, cosa que en la Región de Murcia es una realidad desde hace años».
Según ha insistido Luengo, «en materia de gobernanza y gestión del ciclo integral del agua estamos a la vanguardia nacional y europea, y cabe recordar que la Cuenca del Segura es la única que hace un uso relevante de agua desalada para regadío, cifrándose en un 20 por ciento sobre el total de los recursos».
«Pero esos recursos, que son complementarios, lo son a un alto precio, tanto económico como medioambiental, un aspecto que ha de ser tenido en cuenta, puesto que la sostenibilidad es menor que la de otras infraestructuras. El elevado precio de la energía eléctrica hace que el agua desalada tenga un coste inasumible para los usuarios, penalizando a los regantes de la Región de Murcia frente a los del resto del territorio que no hacen uso, o no pueden tener acceso a estos recursos», ha subrayado el titular murciano de Agua.
Asimismo, ha hecho hincapié en que «necesitamos infraestructuras hidráulicas que permitan asegurar la transferencia de recursos de donde en un determinado momento los hay disponibles a dónde son necesarios y hay carencia. Esto es algo que ahora mismo estamos viendo y viviendo con el gas, y nadie pone en duda la necesidad de construir las infraestructuras precisas para llevar gas o energía dónde hace falta, incluso traspasando las fronteras de la nación», ha agregado.
«Los trasvases, como el Tajo-Segura, son infraestructuras limpias y sostenibles por las que apostar para garantizar el reparto de un bien de primera necesidad como es el agua en España», ha concluido Luengo.