La agonía ha terminado. Después de semanas y meses de ir reduciendo progresivamente la variedad y el número de productos en exposición, Supersol cierra sus puertas en Guadalajara. A lo largo de muchos años ha venido ocupando la superficie comercial que abrió hace dos décadas bajo la iniciativa local que supuso Gelco, una innovación que resultó trascendente para aquella ciudad y que sólo puede ser comparable a lo que supuso la implantación del también desaparecido Galeprix de la plaza de Santo Domingo.
Atrás quedan muchos desplazamientos de muchos alcarreños hasta el polígono del Balconcillo para comprar buena carne de la tierra, asomarse a las ofertas y saludar por los pasillos a más de un conocido.
El declive de su última etapa ha llegado a su fin, dejando en el paro a una veintena de trabajadores. Hoy, viernes, 20 de diciembre de 2019, es su último de atención al público, ofertando a precios de liquidación los productos disponibles.