Si hay un asunto que enerva por igual a pacientes y sanitarios es el de las listas de espera, tanto para la realización de prueba clínicas como para consultas de especialidades u operaciones quirúrgicas. En Castilla-La Mancha, durante años, se derivaron numerosísimas de estas actuaciones a la sanidad privada, esencialmente de Madrid, cuando con el consejero Fernando Lamata se marcaron plazos máximos tasados, que los pacientes podían exigir.
¿Va a volver eso mismo? En un par de meses estará todo mucho más claro, justo en víspera de las elecciones, ya que lo que tenemos ahora mismo es el anuncio genérico por parte de García-Page… y las críticas inmediatas desde el PP.
Por de pronto, el presidente ha avanzado que esta nueva normativa será «más ambiciosa» que aquella a la hora de regir los tiempos máximos de espera en la sanidad regional.
Emiliano García-Page ha fijado este miércoles el próximo el mes de marzo como fecha para la aprobación de la Ley de Garantías en Listas de Espera Sanitarias, un proyecto que, ha dicho, será «una gran referencia» para la región en la próxima legislatura.
García-Page, en declaraciones a los medios desde Ocaña, ante la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha asegurado que la región quiere ponerse «el listón alto» en cuando a la atención sanitaria.
«No nos obliga nadie, pero queremos poner una ley que deje muy claro el tiempo que se puede estar en una lista de espera para esto y para aquello», ha manifestado.
Para el presidente castellanomanchego, la aprobación de una normativa de este tipo supone «meter en un carril de previsibilidad y de organización» al sistema sanitario. «Es lo mínimo que nos debemos», ha apostillado.
En este sentido, ha recordado que la ley que contemplaba estos tiempos máximos de espera «murió con los recortes» y ha explicado que ha costado llegar a tener en la región «un nivel tal de servicios que nos la volvamos a plantear».
Además, ha precisado, esta nueva normativa será «más ambiciosa» que aquella a la hora de regir los tiempos máximos de espera en la sanidad regional.
Críticas desde el PP
La portavoz del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha, Lola Merino, ha aseverado este mismo que «reducir la espera no es precisamente la especialidad» del presidente, Emiliano García-Page, ya que «son ya ocho años los que llevan esperando los castellanomanchegos sin ver cumplida su reiterada promesa de fijar los tiempos máximos de espera en sanidad».
Merino ha insistido que Page «prometió que en 2018 estarían fijados los tiempos de esperan en 90 días para una operación, 30 días para una prueba diagnóstica y 15 días para una consulta, algo que volvió a anunciar esta legislatura y que sigue sin cumplir».
La portavoz ‘popular’ ha incidido en que Page «no solo no ha cumplido lo prometido, sino que, ante las escandalosas listas de espera, en lugar de dar solución y paliar el sufrimiento del paciente, se dedica a manipularlas y maquillarlas».
Por último, ha destacado la propuesta del presidente regional del PP, Paco Núñez, para poner en marcha un Plan de Choque para reducir las listas de espera, al que el PSOE de Page «siempre ha dicho que no».