Hasta ahora, y desde hace muchos años, la presencia del lobo dentro de Castilla-La Mancha se ceñía en exclusiva a la provincia de Guadalajara, con especial incidencia en la Sierra Norte.
Los ganaderos alertan de que es en esta época, cerca del otoño, cuando más ataques se producen, por ser el momento en el que las nuevas camadas alcanzan la edad para empezar a aprender a cazar. Desde APAG Guadalajara confirman que, tras unos meses de tranquilidad, los ganaderos han vuelto a sufrir la presencia del lobo en el norte de la provincia.
En concreto, en Cantalojas se han producido varios ataques al ganado desde el 15 de agosto, con un balance de siete ovejas muertas, cuatro terneros mordidos y dos desaparecidos.
Guadalajara quizá ya no sea un caso único en la región
La Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) de Toledo ha puesto sobre aviso a los ganaderos de la Sierra de San Vicente por la sospecha de que pueda haber lobos en la zona, ante el ataque sufrido por un rebaño de ovejas, cuyas heridas podrían ser compatibles con las causadas por esta especie.
Esta es una zona limítrofe con la Sierra de Gredos, en Ávila, donde existe una población de este depredador. De confirmarse, se trataría del primer avistamiento de lobos en la provincia en años.
Su presencia confirmaría su expansión, señalan desde Asaja, «favorecida por el cambio de estatuto jurídico de las poblaciones de lobo ibérico, incluidas dentro del listado de especies silvestres en régimen de protección especial y en la Estrategia de Conservación del Lobo, algo que imposibilita su control cinegético en aquellas comunidades que hasta ahora autorizaban su caza, de manera que las medidas de control de la especie han pasado a tener un carácter excepcional».
Asaja Toledo ha pedido la «máxima cautela» ante lo que, de momento, son sospechas, pero pide a los ganaderos de la zona que extremen las precauciones cuando el ganado esté suelto.