Lo explica el secretario de Organización del PSOE de Guadalajara y alcalde de Marchamalo, Rafael Esteban, que lo ha descrito con todo detalle en su cuenta de la red «X», lo cual le ahorra a este Chismorreador cualquier trabajo complementario:
Hoy nuestra sede del @PSOEGuadalajara amanece en este estado. Este tipo de actos de vandalismo son un triste reflejo de cómo una pequeña parte de nuestra sociedad opta por el odio y la confrontación, en lugar de buscar construir juntos una comunidad mejor. Sin embargo, esto no representa a la gran mayoría de ciudadanos y ciudadanas, que prefieren el diálogo y el respeto como pilares de convivencia. Este fin de semana hemos visto también ataques verbales y desprecio hacia el Rey, la Reina, el Presidente del Gobierno y el Presidente de la Comunidad Valenciana en Paiporta, organizados por grupos de extrema derecha, en un momento especialmente sensible para muchas personas en nuestro país. En días recientes, la #DANA ha dejado tras de sí un rastro de destrucción, afectando a familias y comunidades que ahora deben enfrentarse a los difíciles efectos de esta catástrofe natural. Es en estos momentos cuando necesitamos más empatía, más solidaridad y menos odio. Queremos recordar que las instituciones estaremos siempre aquí para apoyar a quienes más lo necesitan, trabajando sin descanso para intentar paliar los efectos dañinos de estas catástrofes. Entendemos que muchas personas están pasando por momentos de desesperación y que la frustración puede ser grande, pero las instituciones están para ayudar, para ofrecer respuestas y para trabajar codo con codo con quienes se han visto afectados. En el PSOE, creemos firmemente en el compromiso de las instituciones para con la ciudadanía, especialmente en los momentos de crisis. No podemos permitir que el odio o el vandalismo se conviertan en una salida ante la frustración. Al contrario, en estos momentos difíciles, necesitamos más que nunca unir fuerzas, actuar con responsabilidad y, sobre todo, tender la mano a quienes están sufriendo. Hacemos un llamamiento a que, frente a la adversidad, optemos por la solidaridad, el respeto y la colaboración. No es momento de dividirnos, sino de demostrar que, como sociedad, podemos sobreponernos a las dificultades trabajando juntos. Solo así podremos construir un futuro donde nadie se sienta abandonado y donde las instituciones cumplan su misión de proteger y apoyar a la ciudadanía en todo momento.
