El Ayuntamiento de Guadalajara va a iniciar, el próximo miércoles, 27 de abril, una «amplia» campaña informativa de concienciación para que los dueños de perros recojan los excrementos caninos y limpien los orines con agua jabonosa o vinagre. También pretenden acabar con la alimentación irregular de gatos callejeros. Las multas para los infractores pueden llegar hasta los 3.000 euros a partir de mayo, cuando entre en vigor la modificación de la ordenanza que regula la tenencia de animales.
Quien ha avanzado esta novedades ha sido el concejal de Limpieza y Servicios Municipales, Jaime Sanz, acompañado de Patricia Yebra, de la empresa Valoriza, responsable del contrato de Servicio de Limpieza Viaria y Recogida de Residuos en la capital alcarreña. Durante su comparecencia de este miércoles, el concejal resaltado que «no es solo cuestión de limpieza o estética sino de higiene y salud pública».
En consecuencia, a partir del mes de mayo, no recoger las heces de las mascotas en la vía pública, parque o zonas ajardinadas o no limpiar los orines con agua o sustancia jabonosa o vinagre supondrá una falta muy grave que llevará aparejada una sanción de hasta 3.000 euros, ha alertado Sanz.
Contra el incivismo, folletos… y multas
Y con el objetivo de no llegar a esto y en respuesta a una demanda de la sociedad de Guadalajara, el Ayuntamiento va a repartir 45.000 folletos informativos con los cambios más importantes de la ordenanza, que se buzonearán en las viviendas y se podrán recoger en las distintas dependencias municipales.
Además, durante quince días, dos monitores recorrerán las calles ajardinadas, zonas verdes de la ciudad, y especialmente los barrios más afectados, como son Escritores, Las Ramblas y Las Cañas, para concienciar de esta problemática, fundamentalmente a los dueños de mascotas, e informarles de las sanciones que a partir de mayo puede conllevar no cumplir con la misma.
Igualmente, se van a repartir 9.000 estuches contenedores de bolsas para la recogida de excrementos caninos y 9.000 botellas para limpieza de orines. Ambos lotes podrán recogerse, además, en cada uno de los centros de barrio, en el Centro Municipal Integrado y en varios centros sociales.
Gatos callejeros
Además, la Concejalía de Transición Ecológica trabaja también en otra campaña dirigida a controlar las colonias felinas a través del protocolo CES.
La ordenanza también pretende controlar las colonias de gatos y sancionar a quienes alimentan a estos animales sin contar con autorización para ello, con sanciones que igualmente pueden alcanzar hasta los 3.000 euros.
El concejal ha insistido en que, con esta ordenanza se persigue mejorar los niveles de limpieza en la ciudad en relación a los excrementos caninos y a los desperdicios de comida, «pero también mirar por la salubridad de las calles».
Una de cada tres quejas de los vecinos, por los excrementos en la calle
En este sentido, ha ofrecido algunos datos llamativos sobre las quejas recibidas a través del buzón del ciudadano por la presencia de excrementos de perros, computando solo estas el 37,6% del total en esta materia, es decir, de cada diez quejas de limpieza viaria cuatro eran por deyecciones caninas, y en el caso concreto de zonas verdes, el porcentaje aumenta hasta el 50%.
«Estos datos nos dan a entender el incremento importante de conductas incívicas y por ello vamos a actuar. No podemos tener nuestras calles y espacios públicos minados con excrementos de nuestras mascotas porque es una situación que afecta a la limpieza, salubridad y también a la convivencia», ha subrayado.
Por último, el edil ha apuntado que estas medidas responden también a una demanda ciudadana ante una realidad «evidente». Y, a veces, difícil de dejarla sin pisar, cabría añadir.