El proceso de desmantelamiento que Enresa desarrolla en la central nuclear ‘José Cabrera’ de Almonacid de Zorita se encuentra en la fase final, después de que hayan pasado 17 años desde que dejó de estar operativa. Para el inició formal de los trabajos hubo que esperar varios años: exactamente a la una de la tarde del 11 de febrero de 2010 fue cuando Enresa asumió la titularidad de la central para comenzar con su desmantelamiento.
Ahora, tras la finalización de las demoliciones de los grandes edificios de la instalación, se está aplicando el Plan de Restauración.
«El objetivo de este plan es realizar la vigilancia radiológica final del emplazamiento y poder liberarlo», han señalado a Europa Press para LA CRÓNICA fuentes de la Empresa Nacional de Residuos Radiactivos (Enresa).
Con ello «se busca devolver el emplazamiento a sus características iniciales y para garantizar que los suelos que van a ser liberados estén limpios de radiactividad residual, una fase en la que se procede al saneamiento de los terrenos y una caracterización final que permita solicitar la Declaración de Clausura», matiza en su web la propia empresa de residuos.
De momento, desde Enresa prefieren no dar fechas concretas sobre el final del desmantelamiento, ya que todo dependerá de que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) apruebe el informe que ellos tendrán que remitir, algo que ya no depende de la Empresa Nacional de Residuos.
Así, una vez terminada la ejecución de este plan, se elaborará un informe final, que debe ser aprobado por el CSN para obtener la declaración de clausura de la instalación y proceder a la devolución de la titularidad de los terrenos a la empresa propietaria.
En cuanto a las previsiones de gastos en este proceso, según las mismas fuentes, se mantiene el presupuesto según lo previsto inicialmente.
La central nuclear ‘José Cabrera’ se encuentra en el término municipal de Almonacid de Zorita y fue la primera que entró en operación en España, en 1968. Tras 38 años de funcionamiento se puso fin a su actividad por Orden Ministerial del 20 de abril de 2006. Se trata del primer desmantelamiento completo de una central nuclear en España. La intención del Gobierno es cerrarlas todas, incluida la de Trillo, en 2035.